Lo que estás viendo no es ninguna alucinación, es un coche escala 1:1 que desafía a la leyes de la gravedad. La primera vez que lo vi me pareció una especie de tuning bizarro con reactores, pero no se ven gases calientes en ningún momento. Resulta que es una réplica exacta del original.
El material es plástico ligero, como el que sirve para bandejas de plástico en pollos de supermercado, por ejemplo. No sólo es liviano (4-6 Kg), también lo suficientemente resistente. Por dentro está relleno de helio (gas noble no inflamable) y se controla con unas pequeñas hélices por control remoto. Eso sí, el parecido visual es sorprendente.
¿Pero cómo se consigue una réplica de estas? Normalmente se encargan para eventos publicitarios, está comprobado que atraen al público que no está puesto al día en tecnología. Están basado en el mismo principio que los zepelines, pero a diferencia de estos, no pueden arder, como los globos de helio que tanto flipan a los pequeños.
Desde que se encargan hasta que se dan al cliente pasan unas seis semanas. Están diseñados para operar en sitios cerrados, ya que con muy poco viento son difíciles de controlar y no creo que sean precisamente baratos si se caen al suelo malamente. De hecho, sólo con repintarlos aumentan de peso lo suficiente para no poder volar.
Tienen una autonomía de unos 20 minutos, pero en sólo 5 están listos para levantarse de nuevo. La Web de la empresa que los fabrica no anuncia precios, así que es bastante probable que se escapen al bolsillo medio.
Más información: Gear Factor y Airstage
Parece un buen método publicitario.Llama mucho la atención y además se podria anunciar cualquier cosa.
que bueno, es genial la idea, como se pongan de moda los estoy viendo por todas partes, jeje.
un saludo ;).
Lo vi en Top Gear hace unos cuantos años y segun decían podías comprar unos 5 coches de verdad con lo que costaba el coche volador. Por eso, no creo que veamos muchos flotando por ahi.
Eso si, llama muchisimo la atencion.
Muy muy original….