Un día vino a verme mi «buen amigo» que trabaja en Renault, decía que quería enseñarme algo. Al salir a su encuentro, estaba aparcado un Clio de tercera generación como el de la foto, en el mismo color. Me invitó a conducir, aunque le dije que me daba igual ir de pasajero, insistió.
Y es que mi amigo quería enseñarme algo. Introduje la llave en la cerradura de la parte superior del salpicadero y arranqué el coche. Con el tacómetro tarado a 7.000 RPM, estaba claro que era un gasolina. Le dije que por el ronroneo del motor parecía ser un 1.2 o un 1.4, y mi amigo asintió. No me había fijado en el anagrama de motorización de la puerta.
Hubo una cosa que me dejó completamente patidifuso, el cuentakilómetros indicaba una cifra por encima de 687.000 kilómetros. «¿Y esto» – le pregunté, me parecía un número totalmente inverosímil para un coche de 10 años o menos. Mi amigo respondió que era una especie de coche de pruebas de largo recorrido, para comprobar lo de la «Calidad Renault». Y me puse a conducirlo.
Para ser un coche con semejante palizón, no era para tanto. La dirección iba bien, tan poco informativa como cuando estaba nuevo, el cambio de marchas con alguna holgura que otra, pero no se oía ni un puñetero grillo. El amigo de Renault sonreía complacientemente. La función de este «buen amigo» es mejorar la imagen de la marca a mis efectos.
Llegados a este punto, sí, hablo de un sueño. Había una pista para enterados, el Clio de tercera generación se arranca con una tarjeta (salvo el modelo más sencillo de la foto), no tiene hueco de llave en la pantalla central superior. Mi subconsciente veía todo eso muy raro, porque dicha pantalla tenía números amarillos muy grandes, como los del Opel Astra y Corsa de la década anterior.
Pero sin duda lo menos creíble del sueño es que un Clio pudiese tener esa somanta de kilómetros sin signos evidentes de estar reventado. Os remito a mi breve experiencia al volante un Clio de segunda generación que tuve como coche de sustitución un par de días. Con menos de la tercera parte de kilómetros estaba casi para tirarlo.
Seguro que Renault es una marca preocupada por la calidad en mayor o menor grado, pero está claro que los Clio no se han diseñado para eso. De hecho, no he visto nunca un utilitario que haya pasado los 500.000 kilómetros, y si lo he hecho, no me acuerdo. Además, tampoco tendría sentido hacer los coches tan duraderos.
Si miramos el interior del Clio III, aunque es un modelo relativamente reciente, ya parece completamente desfasado, tanto por dentro como por fuera. Me suele dar vértigo ver lo que han cambiado las cosas desde que empecé a probar coches, y de eso hace solo 11 años. Más o menos a estas alturas de año de 2004 ya había conducido mi primer coche de prensa, con el carné aún oliendo a horno.
Y no existe la figura del «buen amigo» de Renault, aunque en el sueño le atribuí la cara de un trabajador real del departamento de prensa de Renault, aunque su nombre era el de otro compañero suyo. Vamos, que ese día mi mente deliraba. Es lo que pasa por dormir a más de 30 grados en una habitación sin ventilación, con el mar a 10 kilómetros. Recuerdo lo que recuerdo porque tecleé en el móvil los mínimos detalles. Si no, seguramente, este sueño habría sido eliminado de mi memoria.
Aunque Renault se currase los coches hasta el punto de poder durar dignamente más de 500.000 kilómetros, ¿quién lo aguantaría tanto tiempo? ¡Si no tiene pantalla táctil ni puede leer discos con MP3! Esperad, se me olvidaba, ya no es trendy eso de grabarse discos, pudiendo usar el Spotify o pinchos USB. En este modelo no se podía poner ni una cosa ni la otra.
Lo de aguantar un gasolina tantos kilómetros da para un tema aparte. En principio, la mayor simplicidad mecánica de los motores atmosféricos de gasolina es un punto sobre los 1.5 dCi con sobrealimentación, pero claro, con tantos kilómetros, el diésel se ha amortizado más de una vez, incluyendo posibles averías.
Javier, la empresa en la que trabajo no es distinta a las demás y por causas que todos conocemos y sufrido de una u otra manera, se han recortado gastos.
Creo, y así me lo esta demostrando mi actual vehículo de trabajo, que cambiamos por aburrimiento en la mayoría de las ocasiones Nos autoconvencemos de que esta viejo para acudir a un concesionario, a pesar de poder hacerle varios cientos de miles de km mas . El motor de mi Peugeot 206 diesel convencional (el HDi le pilla lejos) tiene, a día de hoy, 641.000 km.
Otro ejemplo es un 106 1.5 d con mas de 450.000 km.
Cierto que son coches sencillos, prácticamente sin electrónica, pero ahí están y aguantan.
En mi caso, hay semanas que hace mas de 2.000 km.
El interior ha soportado mucho peor el paso del tiempo que el Clio que mencionas en el artículo; siendo los mas sufridos los asientos.
Defectos, un gran consumo de aceite (cada 15.000 km hay que reponerlo entero) y ruidos parásitos. Por lo demás, funciona.
Un saludo,
Joder con los motores atmosféricos Diesel, hacen honor a su leyenda… :O
Javier, he sabido de motores renault k7m (1600 cc. 8 válvulas) que con adecuado mantenimiento superan largamente los 300.000 kilómetros. Atmosféricos muy sencillos pero aguantadores.
Pues los K7M se montaron en los Dacia Logan y Sandero 1.6 de 90 CV, tienen motor para rato pues.
Yo he visto un C5 2.0 HDI 1
Con 670.000 km.
Sin abrir motor ni cambiar turbo
Un Laguna 1.9 DCI de 110cv
Con 495Km.
Sin abrir motor con turbo cambiado.
Todo es el tipo de uso que se le dé y el mantenimiento adecuado.
Ahora los diesel no duran tanto porque tienen FAP y llevan las presiones cilindro a otro nivel ; todo va apretado para cumplir normativas.
Y…. ahora mismo todos (TO-DOS) los diesel son una maraña de complicaciones y sufren averías.
Pero Renault no es precisamente una marca poco fiable en motores.
Ya quisiera BMW en algunos
Pues he oído pestes de los 1.5 dCi cuando hacen muchos kilómetros (ya, hay muchos motores K9K y con muchos niveles de evolución) y pocos taxistas verás confiando en Renault. Como poco, da para pensar.
¿495 kilómetros y turbo petado? ¿En serio? :O
Qué emoción leer este artículo … y recordar cómo hace 10 años tuve que entregar a Desguaces La Torre un Clio 1.2 de gasolina con 60.000 km. y 5 añitos. Fallos con el ABS, los inyectores,…y finalmente el motor que peta, TODAS las revisiones en talleres oficiales. El viaje màs largo un Cádiz – Madrid. Poquita ciudad, bien cuidado , etc, etc,…Desde entonces solo japos y feliz.
Yo tuve un Citroen saxo 1.500 diesel con 585.000 kms.
Un golf 1500 diesel con 550.000.
Una renault kangoo1.500 diésel con 640.000.
Un renault Modus 1.500. Diesel con 576.000.
Etc.etc.
Ahora tengo actualmente un clio 1.500 diesel y lleva 480.000 y lo que le queda. Es, creo, el mejor de todos. Está como nuevo
En algo se notará que los cuidas. Un saludo.
El Lunes vi un Renault 19 1.4 energy gasolina de 30 años casi que tenía 850.000km y el dueño lo utiliza diariamente para recorrer unos 180km diarios para ir a trabajar… Me lo estuvo enseñando y me quedé flipando.
¡La hostia!
Ya que está, que lo haga histórico. Se lo ha ganado.