Como alguien que se dedica a la información del motor, no he podido ser ajeno al tema estrella de las últimas semanas, el caso #Dieselgate de Volkswagen, o el falseamiento de las emisiones de motores Diesel. He escrito del tema tanto en Motor.es como en Pistonudos, y en este mismo blog hay un espacio dedicado al caso.
Puede que no lo parezca, pero insistiré, no tengo ninguna inquina al Grupo VAG, no más de la que le tengo a Toyota por los escándalos de calidad que sufrieron hace pocos años, ni de la que le tengo a General Motors por los bombines defectuosos de encendido y otros tantos problemas de calidad. Son gajes del oficio, esta vez le ha tocado a Volkswagen.
Ahora mucha gente está visiblemente cabreada con la empresa alemana y sus marcas, han cometido un fraude y tendrán que asumir las consecuencias. Así es, y así va a ser. El coste de la crisis puede valorarse tranquilamente en más de 30.000-40.000 millones de euros entre sanciones, pleitos, coste de las llamadas a revisión, pérdida de valoración bursátil, etc. Incluso algunos expertos llegaron a hablar de la posible quiebra de Volkswagen AG.
Lo sé, ha caído el mito de la eficiencia y honradez alemana, pero estamos realizando juicios paralelos sin haber dado tiempo a las autoridades a determinar los culpables con nombres y apellidos. Posiblemente estaba pringada la directiva, pero a día de hoy, siguen siendo presuntos. Dejemos a la justicia hacer su trabajo.
Si pensamos en Volkswagen como un antílope que va a ser devorado por una manada de leones, y que es lo que se merece, vamos por mal camino. Pongamos que se expolia a la empresa por todos los daños causados, hasta dejarles en el chasis. Que se jodan, ¿no? A lo tonto, es uno de los tres fabricantes de vehículos más importante del mundo, del que dependen más de 600.000 empleos directos y otros tantos indirectos por todo el mundo.
Una empresa tan grande, por muy grande que hayan sido sus pecados, no se debe intentar hacer desaparecer. Por ejemplo, cuando alguien dice que deberían meterse por donde les quepan todos los motores afectados y que devuelvan el dinero… no sé si es producto de la sed de venganza, de la demencia, o de la ignorancia. ¿A quién le interesa que caiga una empresa tan grande? Creo que ni a sus competidores directos les haría gracia.
Los coches que sean revisados y «arreglados» para emitir menos contaminantes seguramente sufrirán una pérdida de prestaciones, un aumento de consumo y una depreciación de su valor de mercado. Los mismos clientes no se quejaron cuando sus motores daban más potencia en banco que en la ficha técnica, ni de gozar de unos valores residuales muy buenos, con una baja depreciación. Ojo, me parece algo muy humano, ¿eh?
Volkswagen tiene que hacer frente a muchas consecuencias producto de su mal hacer y falta de ética, como otras automovilísticas en el pasado. Pero si queremos una compensación justa para todos, ni mucho menos hay que desear que Volkswagen sea desmantelada, ni que quiebre, ni que haga falta rescatarla. Entiendo el cabreo y la ofuscación, pero pensemos con la cabeza fría.
El pasado fin de semana publiqué el reportaje «En Volkswagen no son todo malos humos» (parte 1 y parte 2), en el que explico la otra cara de la moneda. Lo cortés no quita lo valiente, el mismo fabricante que nos la ha dado con queso con la limpieza de los motores TDI (y no son los únicos, tened paciencia) lleva años investigando soluciones de propulsión alternativa que ya pueden comprarse.
Como aficionado y amante del motor, no concibo un mundo en el que no exista Volkswagen. Me da igual que su origen esté relacionado con el partido nacional socialista del III Reich, tema del que ya hablé en su día en Motorpasión. Muchas empresas tienen un pasado muy oscuro, pero vivimos en 2015. Sin necesidad de ir muy lejos, hay mucha gente preocupada en Navarra y en Cataluña, donde hay fábricas del Grupo VAG, por cuál va a ser el desenlace.
Si a una empresa, da igual su tamaño, se le exige y se le exige hasta desangrarla del todo, no habrá reparación del daño para todos. Por ejemplo, la japonesa Takata está en una situación similar. Por haber vendido durante años airbags que pueden provocar heridas graves en su despliegue, tienen que hacer frente a multas, indemnizaciones, sustitución de unidades afectadas e incluso pagar a sus competidores para tener antes los repuestos.
Una cosa está clara, Takata, Volkswagen, o quien sea, sí, que paguen, pero no hay que asfixiarlos. Os pongo un ejemplo, una clienta exige 25.000 euros por la vía judicial para compensar la pérdida de valor de su Volkswagen Beetle 1.6 TDI. Para empezar, con ese motor, ese coche ya no tiene ese valor aunque fuese a tope de equipamiento y tuviese 5.000 kilómetros. Es una pasada de rosca, y habrá más. Confío en la sensatez del sistema judicial. A lo mejor con 2.500 euros va que se mata, no va a perder tanto valor el coche por la crisis.
Puede que los precios de los Volkswagen, Audi, SEAT y Skoda con los motores afectados (1.2 TDI, 1.6 TDI y 2.0 TDI de la familia EA189) disminuyan, tanto si se han revisado como si no. Igual simplemente resulta que los valores residuales se alinean más con los de coches de similar segmento, prestaciones y equipamiento. De ahí a buscar la aniquilación de la empresa… hombre, hay un salto de gigante…
No tengo ningún Volkswagen, pero aunque lo tuviese, no iría tan lejos con mis reclamaciones. Hay diferencia entre exigir una JUSTA compensación, y otra bien distinta hacer leña del árbol caído. Me reitero, por partida doble, para que quede claro. Es más, si no tuviese en mente venderlo, igual ni reclamaba por la pérdida de valor. Con que me lo arreglasen, me conformaba. Es que soy de esos hippies que prefiere que le capen el motor para que contamine menos.
Por otra parte, asumo mi parte de culpabilidad en haber «ayudado» a vender coches con esos motores, pero en mi descargo declaro que no hice una medición de gases de escape (carezco de medios para ello) y que fueron recomendaciones de buena fe. De haber sabido que podían emitir hasta 40 veces más NOx de lo permitido, me habría cuidado mucho de dar el mismo veredicto.
Buenas tardes yo me he apuntado a DenunciasColectivas.com en la primera plataforma de ayuda
al ciudadano, la cual me esta ayudando a realizar todos los tramites para reclamar lo que es mío.
La recomiendo de corazón no sabéis el gusto que da saber que existe gente que quiere
y puede ayudarnos a que podamos reclamar lo que es nuestro y en lo que nos han engañado.
Os recomiendo que os apuntéis en http://www.denunciascolectivas.com/index.php?opc=denuncias_apuntarme&id=46
Un Saludo a todos ¡Juntos Podemos Conseguirlo!
Pero que sugieres Javier? Que hagamos beneficencia con Volkswagen? Que nos solidaricemos con los 600.000 trabajadores del grupo, aunque reconozco que ellos no tienen la culpa de los errores de la cúpula directiva? Acaso promover una ley de financiamiento para evitar el presunto descalabro bajo la premisa de evitar un mal mayor? Los grandes imperios nacen, se desarrollan y finalmente mueren, es una ley ineludible. También sucede con las pequeñas y medianas empresas y sus anónimos trabajadores que cruelmente son devorados por los voraces tiburones y nadie, reitero NADIE se preocupa por estas «víctimas» del capitalismo darwiniano. Conviene -es etico- distinguir según la magnitud de la empresa que merece salvatajes o rescates, como quieras llamarlos?
Es claro que la bola de nieve empieza a rodar y sus consecuencias serán imprevisibles.
Bruno, soy consciente de las consecuencias nada agradables de que caiga una empresa tan gorda, si la presión que se ejerce sobre ella resulta ser excesiva. Seguro que puedes defenderte contra una abeja, tal vez unas cuantas de ellas, pero como te ataquen varios enjambres date por jodido.
La asunción de responsabilidades debe ser compatible con la superviviencia de la empresa y de sus trabajadores. Empezar a inundar los tribunales con indemnizaciones pasadas de rosca hace un flaco favor a la causa. Primero hay que saber quién ha sido, y dejar a la justicia trabajar. Cuando esté todo claro, a reclamar, pero sin asfixiar a la empresa. El daño que se puede provocar sí que es imprevisible, y nada bueno.
Yo no tengo un VW, pero si fuese el caso, reclamaría la devolución íntegra del valor del vehículo (no el actual sino lo que pagase en su momento) y que se lo queden. Porque han vendido productos que no poseen las características que publicitaban, y si con la llamada a revisión, pierde potencia o incluso sigue contaminando más de lo debería, no lo quiero. No solo es la estafa de las homologaciones, también es publicidad engañosa.
Pues Javier, precisamente si yo compro un AUDI es porque su depreciación hasta hace poco no era tan acusada como otras marcas. Eso era un valor de la marca que muy posiblemente se perderá y SÍ exijo una compensación más allà de la reparación del daño. Aunque que alguien nos explique se repara el daño medioambiental que ha sufrido el planeta, 11 millones de tubos de escape son muchos tubos.. y muchos gramos por quilometro. Yo quiero que VW continue, que la empresa sobreviva y se sobreponga a la crisis, sobretodo porque si no es así muchas familias pagaran un pato que no les corresponde pagar. Pero eso no quita que quiera uan compensación justa. Y entiendo que por ejemplo una compensación justa seria que me cambiasen el coche, entregando el mio a cambio y con tres condiciones bàsicas: 1.- Unas disculpas y un peloteo exagerado solo cruzar la puerta del concesionario. 2.- que se valore mi coche «trucado» a un precio justo, el que hubiese tenido sin el escandalo actual, es un coche que a penas tiene 3 años, y 3.- que se me ofrezca el coche nuevo con un descuento MUY IMPORTANTE. En ese caso me sentiria bastante resarcido, aunque no sé si otros clientes seran tan «comprensivos».
No estoy de acuerdo con que no se reclame. VW me ha engañado porque me ha vendido un coche ilegal, y me lo entregó con un documento como es el permiso de circulación que certifica que es legal. Y tampoco esto y de acuerdo en que me capen el motor. Yo compré un coche de 170 CV con unas curvas de par y potencia que formaban parte de las caracteristicas publicitadas, y si pagué su precio es porque quería un coche de esas características y no otras y sigo sin quererlo. A mí un coche capado aún con indemnización no me interesa. Si la solución es cara que se lo hubiesen pensado antes.
Precísamente ideas como que por ser el impacto económico de la solucion enorme, no se debe exigir es lo que hace que estos directivos sin conciencia se consideren «blindados» ante la ley.