
Sí, no te han tomado el pelo, existe un taxista en España que conduce un Maserati, y es el único. Se llama Jesús Lobo, y es un taxista sevillano que buscaba algo más chulo que su anterior taxi Citroën Picasso. Se ha comprado un coche de lujo, pero que nadie piense que es idiota.
Se trata de un Maserati Ghibli Diesel, la versión más económica de la marca del tridente en nuestro país. Cuenta con un motor diésel de seis cilindros y 275 CV retocado por Ferrari, y si tú o yo nos vamos a comprarlo, nos pedirán 76.500 euros. Ahora bien, como es un vehículo para utilizarse como taxi, está exento del impuesto de matriculación y del IVA, por lo que no ha llegado a los 61.000 euros, extras aparte. Ciertamente lleva unos cuantos extras, pero el precio base es ese. Está «igual de loco» que si un colega suyo se compra un Mercedes Clase E. Y los hay, cobran lo mismo, pero consiguen carreras más agradecidas.
Jesús Lobo está obligado a cobrar exactamente el mismo importe por carrera que sus colegas con Octavias, Dacias, Toledos, Prius o Picassos. Las tarifas están reguladas. Ahora bien, se puede diferenciar de otros colegas por dar un servicio diferenciado, además de tener un coche que no tiene rival en la ciudad hispalense. Él considera que tiene algo más que un trabajo, el placer de conducir un Maserati todos los días. Él lo llama Taxirati.